¿Qué pasos debo seguir si pierdo mi teléfono móvil?
Perder nuestro teléfono móvil es una de nuestras principales pesadillas desde que existen los smartphones. Y con razón. No dejes que perder el móvil te estropee las vacaciones si lo dejas en la playa, si desaparece, si no está en ninguna parte… Hoy te enseñamos los pasos que debes seguir si pierdes tu teléfono móvil. Lo primero, no te desesperes. Lo segundo, sigue paso a paso nuestros consejos y quizá el drama es ligeramente menor.
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Intenta encontrarlo
Si tienes un iPhone puedes descargar la aplicación Find My Phone e iniciar sesión en iCloud.com para ver dónde está tu teléfono. Esta es la opción más sencilla y la más útil.
Si tienes un Android, tendrás que tener antes configurada la opción de encontrar tu dispositivo (ya tardas en activarla) y se hace desde Configuración > Seguridad y ubicación > Buscar mi dispositivo. Si tienes esto configurado solo tendrás que ir a la página Android.com/find o sencillamente buscar en Google “encontrar mi dispositivo” y aparecerá la ubicación. Otra opción es que descargues la aplicación desde Google Play.
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Cancela tu tarjeta SIM
Uno de los riesgos de que pierdas tu móvil es que lo encuentre alguien y realice llamadas desde tu teléfono o use tus datos. Esto derivará en una preocupante factura a final de mes. Si pierdes tu móvil tendrás que ponerte en contacto con tu compañía y cancelar la tarjeta SIM.
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Avisa a la policía
Si estás seguro de que ya no hay forma de encontrarlo, avisa a la policía. Necesitarás una denuncia a la policía si pretendes avisar a tu seguro para conseguir otro teléfono o para ver qué pueden hacer por ti.
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Avisa al seguro
Una vez que ya tengas la denuncia, avisa al seguro. Si no tienes uno, en Phone House puedes proteger tu teléfono móvil no solo en caso de rotura sino también en caso de robo o de hurto y tu móvil estará protegido hasta 3.000 euros así que tengas el teléfono que tengas sabrás que no hay problema (o no tanto) si desaparece durante tus vacaciones.
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Consigue una nueva tarjeta SIM y nuevo teléfono
Una vez que tengas todo solucionado tendrás que rehacer tu vida. Necesitarás un nuevo teléfono (tendrás uno de reemplazo si tienes un seguro o tendrás que comprar uno si no lo tenías) y tendrás que ponerte en contacto con tu compañía para que te manden una nueva tarjeta SIM y poder seguir tu vida.