Qué es el «Cloud Gaming» o como jugar en la nube sin consola
Algunos creen que el futuro de los videojuegos pasa por no tener que depender de un hardware físico, es decir, lo que hoy conocemos como consola. Lo cierto es que estamos asistiendo a los albores del “cloud gaming”, una forma de jugar en la que solo necesitamos una pantalla y una buena conexión a la red. Pero, ¿cómo funciona? ¿Tiene futuro el cloud gaming?
¿Qué es el cloud gaming?
El cloud gaming, también conocido como juego en la nube, es una forma de disfrutar de videojuegos sin necesidad de descargarlos o instalarlos en un dispositivo local, como sí ocurre con una consola de videojuegos o un PC. Es decir, que los juegos se ejecutan en servidores remotos, generalmente en centros de datos, y se transmiten en tiempo real a través de Internet a los dispositivos de los jugadores.
Como la latencia de las conexiones de Internet de última generación es mínima, la transmisión puede realizarse con un mínimo retardo. De esta forma, los jugadores pueden acceder a una amplia variedad de juegos a través de plataformas en línea que ofrecen servicios de suscripción o compra de juegos individuales.
Estas plataformas suelen tener bibliotecas de juegos que los jugadores pueden elegir y jugar en streaming, lo que significa que pueden comenzar a jugar de inmediato sin tener que esperar a que se complete la descarga o instalación del juego. Como decimos, una de las ventajas del cloud gaming es que los jugadores no necesitan hardware de juego de alto rendimiento para disfrutar de juegos de última generación, ya que los servidores remotos son los que manejan la carga de procesamiento y gráficos.
Ventajas e inconvenientes
Otra de sus ventajas es que permite a los jugadores jugar en cualquier momento y en cualquier lugar, siempre que tengan una conexión a Internet estable. Es decir, que disfrutar de juegos en sus dispositivos móviles mientras viajan, con la comodidad de no tener que llevar consigo la consola de un lado a otro.
Pero para saber si estamos o no ante el futuro de los videojuegos, antes deben resolverse algunos inconvenientes en el cloud gaming. Por ejemplo la dependencia de una conexión a Internet rápida y estable para una experiencia de juego óptima, la posibilidad de latencia en la transmisión de datos que puede afectar la jugabilidad y la necesidad de suscripciones o compras de juegos en línea. La unificación de plataformas y estándar también es un desafío que se debe resolver.