Samsung Galaxy S8: comparativa de velocidad con Android Nougat y Oreo
La llegada de una actualización que integra una nueva versión del sistema operativo para un teléfono siempre es algo positivo, ya que se suelen añadir novedades importantes. Pero siempre existe la duda de si el rendimiento mejorará frente al que ofrecía antes. Esto es algo que se ha querido comprobar respecto a la llegada de Android Oreo a los Samsung Galaxy S8.
Desde hace unas semanas varios usuarios han comenzado a probar el funcionamiento del nuevo firmware para el Samsung Galaxy S8 que se basa en el sistema operativo Android Oreo, la última versión que Google tiene en el mercado. Este, al menos por lo que se ha podido ver en otros terminales como los Google Pixel 2 XL, aumenta tanto el rendimiento que ofrecen los dispositivos, así como la autonomía (debido especialmente a que se optimiza la funcionalidad Doze). El caso, es que se ha publicado un vídeo en el que se muestra el funcionamiento en paralelo de un modelo de gama alta de la firma coreana con esta versión del desarrollo de la compañía de Mountain View y, también, con el que actualmente da uso que no es otro que Nougat.
Por cierto, si te preguntas para cuando se espera la llegada de la actualización para el Samsung Galaxy S8 para que disfrute de la versión Android Oreo, todo apunta que estas navidades será cuando se comience con el despliegue que, como es habitual, se realizará de forma gradual (primero en un par de regiones no muy grandes y así se comprueba que todo va bien y, posteriormente, llegará a los mercados más importantes entre los que no faltará España).
¿más rápido el Samsung Galaxy S8 con Android Oreo?
A continuación os dejamos el vídeo que se ha publicado y en el que se puede ver a un Samsung Galaxy S8 en el que está instalado el firmware con Android Oreo (el modelo que utiliza Nougat es un Samsung Galaxy S8+). Recordemos que tiene una pantalla de mayores dimensiones pero el hardware interior es exactamente el mismo. Esta es la grabación:
No se ha querido caer en el uso de aplicaciones de rendimiento habituales, como puede ser Geekbench, ya que es posible que el firmware con Oreo no está bien finalizado todavía y se corre el riesgo de que produzcan fallos de funcionamiento. Pero lo que sí se he hecho con los Samsung Galaxy S8 es ejecutar apps de uso habitual, como por ejemplo el navegador de Internet, y comprobar cuál de los dos es capaz de abrir antes una página determinada -lo mismo ocurre con algunos juegos-. Y, si nuestra vista no nos engaña, el dispositivo con la última versión de Android es el que se lleva el gato al agua. Es decir, el Samsung Galaxy S8 (y esto creemos que es así pese a disponer de un panel de menores dimensiones).
Pues visto lo visto, lo cierto es que esta es una de esas ocasiones en las que resulta muy recomendable instalar la actualización que llegue al Samsung Galaxy S8 con Android Oreo, ya que se gana en velocidad y, esto, es importante (aparte, también la seguridad es mucho mejor, así como añadidos en la gestión de las notificaciones y la posible ejecución de las aplicaciones instantáneas). Es decir, que sobre el papel todo son beneficios para el smartphone.