Cómo arreglar la clavija de auriculares del móvil cuando no funciona
Lo cierto es que con la llegada del USB-C, muchos smartphones están perdiendo la clavija mini-jack 3,5mm que nos ha acompañado casi desde los inicios. Pero aún hay terminales que la llevan y no son pocos los que no quieren deshacerse de ella ya que les permite utilizar cualquier auricular con cable sin pensar en tener que recargarlos ni nada parecido.
Pero, hay ocasiones que surgen problemas: parece que no podemos encajar bien el puerto, escuchamos interferencias, sólo se escucha un auricular o con un leve toque se producen cortes. Hay problemas que tienen solución y otros no, veamos los más comunes y como solventarlos.
Suciedad en el agujero
Es el más típico. Al llevar el móvil en el bolsillo, todos sus puertos abiertos, incluyendo el de carga y, como no, el de auriculares que nos ocupa, tienden a acumular polvo y fibras, lo que genera en ocasiones pelusas. Es lo primero que debemos comprobar si nos empieza a fallar o si notamos que no podemos meter bien la clavija.
Para comprobar si algo se ha quedado atascado símplemente tenemos que echar mano de un alfiler. Con cuidado, vamos recogiendo la suciedad que se ha quedado enganchada dentro. Como remate final, los que fueron niños en los 80 seguro que les hace recordar las tardes con su Nintendo, soplamos con fuerza para que salgan todas las particulas que han quedado, o si tenemos un bote de aire comprimido de los que sirven para limpiar un teclado, puede sernos útil.
Agua en el mini-jack
Entramos ya en un terreno más complicado o preocupante. Si tenemos un terminal resistente a los chapuzones no debería ser un problema que se mojara el mini-jack. Y de hecho, con esperar a que se seque suele ser suficiente como para solventar un problema puntual.
Nos podemos encontrar que una gota rebelde no quiera salir del agujero. En ese momento, el truco es echar mano de un bastoncillo para los oídos e impregnar el alcohol sólo la punta. Con cuidado, y muy importante, CON EL MÓVIL APAGADO, metemos el bastoncillo en el minijack y después de frotarlo por las paredes, soplamos o utilizamos aire comprimido. Eso hará que se seque y no dañemos los componentes electrónicos del equipo.
Cuando el problema viene de dentro
Finalmente, si no es un problema de hardware con el propio conector, podemos tener un problema de software. En este caso, la cauística es variada pero la más común es que una aplicación ha hecho algún estropicio con el software del equipo.
Lo cierto es que, en la mayoría de las ocasiones, la solución más rápida es hacer una copia de seguridad de nuestros datos, restablecer el equipo con los valores de fábrica (algo que borra toda la información, de ahí la copia de seguridad), actualizarlo y no volver a bajarnos esa aplicación que ha desbarajustado todo el sistema.
¿Se puede cambiar el mini-jack? Sí, pero en el servicio técnico
Podríamos dar consejos a los más manitas para que se pusieran manos a la obra. Al fin y al cabo, los smartphones en realidad no son sino un gran puzzle electrónico en el que se pueden cambiar casi todas sus piezas.
Pero si no hay forma de arreglar un mini-jack que no funciona (y hemos comprobado que no son los auriculares) y si a través del bluetooth o el USB- C suena el equipo (lo que indica que no hay un problema de software con el audio), el mejor consejo es visitar el servicio técnico para ver si es posible cambiar esa pieza y mantener nuestro móvil, ya que como hemos dicho al comienzo, no son tantos ya los que tienen el preciado conector de 3,5mm.