Cómo evitar sustos cuando llega la factura de móvil de tus hijos


Los niños cada vez tienen antes un teléfono móvil pero desde que aparecieron hay un tema que preocupa a todos los padres, pasen los años que pasen: la factura. Aunque hay tarifas que se adaptan a todas tus necesidades (e incluso tarifas infinitas) no siempre eres capaz de controlar los gastos de tu hijo y acabas pagando muchísimo.

Porque usa más datos de los que debe, porque descarga juegos o se suscribe a servicios… El momento en el que llega la factura de tus hijos en casa siempre es un momento de miedo primero y de bronca después. Así que te damos una serie de consejos para evitar esto y evitar desastres cuando llegue el momento.

Elige bien la tarifa

Elige bien una tarifa en la que pagues por lo que verdaderamente necesita. Si tu hijo se pasa el día conectado a Internet pero jamás te llama por teléfono, no pagues por llamadas. Puedes utilizar el comparador de tarifas de Phone House para ver cuál se adapta más a cada persona y cuál es la más barata y la que más os conviene.

Pon límites

Puedes poner un límite cuando tu hijo consuma los megas o los minutos de llamada contratados. Una vez que consuma lo contratado, no podrá consumir más datos. Si ve Netflix conectado a la tarifa de móvil o vídeos en YouTube, le durarán poco. Pero si no entra en razón y no consigue gastar menos, pon un límite y el móvil recibirá un mensaje cuando sus datos se hayan acabado. Basta con que hables con tu operador para pedir este límite y no te costará nada ponerlo.

Usa tarjetas prepago

Otra opción para que no se pase es usar tarjetas prepago como hacíamos antes. Hay tarifas por las que pagarás una cantidad determinada por adelantado y cuando se gaste, se acabó. Aprenderá a organizarse y recordaremos los viejos tiempos con aquella frase mítica de “tengo que recargar el móvil”.

Aplicaciones de control

Hay aplicaciones de control que permiten saber cuántos datos gastas o cuántos puedes gastar. Estas aplicaciones suelen tener alarmas que te avisan si estás cerca de gastar todos tus datos y así sabrás que tienes que frenar y dejar de consumir a lo loco. Aplicaciones como My Data Manager son muy útiles.

Aplicaciones de control parental

Una aplicación de control parental también es útil en estos casos porque la mayoría son capaces de monitorizar el uso de cada aplicación. Si ves que pasa 10 horas con YouTube al día, tiembla. Estas aplicaciones no solo monitorizan sino que también permiten que bloquees el uso de ciertas aplicaciones de forma remota.